JICA y el tenis de mesa

En el post anterior hay una entrevista realizada a un entrenador japonés de tenis de mesa que estuvo en Chile gracias a la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA, tal su sigla en inglés), muy conocida por nuestra colectividad.
Ese dato no ha sido menor, ya que, además de Chile, otros entrenadores nipones han sido enviados a Latinoamérica. A través de sus respectivas federaciones, países como Uruguay, Honduras (foto), Ecuador y Nicaragua han recibido a nipones destinados al tenis de mesa.
En Argentina, como un país que ha abierto las puertas a la inmigración japonesa –tales como Brasil, Perú, entre otros- JICA ha colaborado enormemente con la comunidad nikkei, aunque, más bien, en temas agrícolas, principalmente, y educativos (idioma japonés, en particular), y a nivel nacinnal.
Igualmente, JICA, como organismo dependiente del Gobierno del Japón, ejecuta los programas de cooperación técnica en base a solicitudes de los países que están en vías de desarrollo. De esta manera, JICA Argentina planifica sus programas en base a un Convenio de Cooperación Técnica firmado entre ambos gobiernos en 1979, y ratificado por ley en 1981, y se desarrollan según varias modalidades: recepción de becarios en Japón, implementación de proyectos de cooperación técnica, estudios para el desarrollo, envío de expertos y voluntarios senior, entre otros.
Actualmente, la Agencia de Cooperación Internacional del Japón en nuestro país se concentra, especialmente, en las siguientes áreas: Economía (promoción de PYMEs, fomento de las exportaciones y desarrollo productivo regional), Desarrollo Social (salud, educación y fortalecimiento de la sociedad civil), Preservación del Medio Ambiente (prevención y remediación de la contaminación del aire, suelo y agua; preservación de los ambientes naturales, medidas contra el Calentamiento Global y la destrucción de la capa de ozono), y Apoyo a la Cooperación Horizontal (promoción de programas de asistencia y cooperación técnica que realizan terceros países).
Como se ha dicho al principio, JICA cuenta con un programa de voluntarios, el cual tiene como objetivo contribuir al desarrolla nacional mediante la interacción y el apoyo activo a las entidades y comunidades que los reciben. Si bien dentro de nuestra comunidad este plan se viene desarrollando desde hace largo tiempo, a nivel nacional esta ayuda ha sido implementado a partir del 2002.
“Los Voluntarios Senior son personas con profundos conocimientos y experiencias en las más diversas disciplinas, con edades que van de los 40 a 69 años, y están motivados por un espíritu solidario para realizar tareas de transferencia de tecnología y fomento de los lazos de amistad”, dicen desde JICA Argentina.
Lamentablemente -al menos para nosotros- estos voluntarios para Argentina se concentran en el “fortalecimiento de exportación de productos argentinos”, el “mejoramiento de la productividad y el control de calidad de las PyMEs”, el “desarrollo de la agricultura y la pesca”, el “mejoramiento del medio ambiente”, el “desarrollo del turismo”, y la “educación y el idioma japonés”.