La actitud refrescante y aplaudible de Ana Codina

El “juego limpio” es algo que se ve cada vez menos en el deporte. Ciertamente, cuando se habla de ello, algunos deportes aparecen en la mente. Sin embargo, eso no pasa con el golf o el tenis de mesa y, mucho menos, con la atleta argentina de dieciséis años, Ana Codina. En el Desafío Mundial de Cadetes, de la IITF, en Vrsac, Serbia, en Octubre del 2006, ella ganó el premio de “Juego Limpio” y ese es el factor de más alto nivel para la joven atleta quien juega para el Club Regatas en Resistencia, que está situado a once horas de la Capital de Buenos Aires. Ver jugar a Ana Codina es un placer: es su atletismo lo que atrae, es su naturaleza deportiva la que hace tenerle respeto, y es esta última característica, en su carácter, la que contagia. Ese desarrollo se debe a su pasión, que comenzó con la gimnasia antes que el tenis de mesa tomara control en su vida deportiva. “El juego limpio es bastante importante para mí”, dijo Ana Codina. Es lo que da la base al deporte, para mi; eso mantiene limpia mi conciencia y desde ese punto de vista, puedo improvisar y conseguir un alto nivel”. Es una actitud bastante refrescante para el deporte y es aplaudible; en cuanto más la observo jugar, puedo verla disfrutar de la emoción de la competencia internacional. Ella tiene una cualidad que la hace una jugadora de clase alta y campeona continental. “Cuando la competencia es difícil lo más fuertes prevalecen”, y uno de esos es Ana Codina. “Me gusta cuando la competencia está reñida, para el tenis de mesa es divertido y es mucho mejor cuando la situación está difícil”, afirmó la joven argentina. “Yo siempre trato de jugar con ética y mucho más cuando está cerrada”. Sin duda alguna, esa es la razón más grande del porqué ella sobresale como un brillante modelo de Latinoamérica. La segunda razón es que ella saca provecho total de todos los eventos desarrollados bajo el Programa de la ITTF.

Ella se presentó en el pasado “Mega 5” en Ecuador y, en El Salvador, ha sacado una gran ventaja del Campamento de Entrenamiento de la ITTF, dirigido por el sueco Emanuel Christiansson y está lista para el Abierto Juvenil de El Salvador. “El Torneo del Circuito Mundial Juvenil”, el campamento de entrenamiento, han sido de mucha ayuda”, explicó Ana Codina. “Tú juegas y practicas junto a compañeros de similar o un nivel más alto, aprendes, mejoras, y definitivamente ha ayudado a mi servicio y primer ataque”.

Sin duda alguna, el primer ataque es un área clave en el tenis de mesa y Ana Codina sabe que eso es vital para mejorar, pero ella ya posee cualidades que son bien difíciles, pero no imposibles de encontrar en un atleta. La actitud que ella demuestra es un modelo para todos, ella se vuelve un ejemplo adecuado y, por encima de todo, ella es la sensación del momento, ella disfruta el reto y ese es el factor que resalta el nombre de Ana Codina entre los niveles más altos y en el futuro próximo.

* Artículo publicado por la página oficial de la ITF.